Es probable que ya hayas leído o escuchado sobre los populares Contratos por Diferencia o CFD y que te hayan surgido varias dudas al respecto. No te preocupes, es bastante común que hoy en día los inversores se pregunten qué es un CFD, pues esta se ha convertido en una de las opciones más populares para operar con cualquier activo subyacente.
En el presente artículo del portal Guía del Trading se darán a conocer los datos más importantes acerca de este tipo de contratos que ha ganado tanta popularidad en el ámbito de las operaciones en línea, incluyendo detalles como su definición, cómo iniciar operaciones haciendo uso de ellos, sus principales ventajas y desventajas, entre otros factores que todo trader debe conocer sin importar su experiencia en los mercados.
Tabla de contenidos
¿Cómo se definen los CFDs?
Un CFD o Contract for Difference en inglés, es un contrato en el que se establece el acuerdo del pago de la diferencia entre el precio actual del activo y su valor cuando se de por terminado dicho contrato. En pocas palabras, el vendedor deberá pagar esta diferencia al comprador.
Estos se clasifican como productos Over The Counter (OTC), es decir que pertenecen al mercado extrabursátil, espacio donde se negocian diversos instrumentos de carácter financiero entre dos partes de forma directa.
Los CFD son considerados como una alternativa a la inversión en bolsa, pues al hacer uso de estos no hay necesidad de adquirir directamente el activo subyacente, ya que solamente es necesario especular sobre los movimientos del precio del activo con el que se encuentre operando.
¿Cómo operar con CFDs?
Muchas veces las operaciones con CFD suelen asustar a los traders, pues creen que su capital no es suficiente, que son herramientas de difícil comprensión, entre otros aspectos que pueden llegar a frenarlos al momento de abrir posiciones.
Pues bien, estos contratos funcionan de una forma más sencilla de lo que parece: si el trader cree que el precio de un activo, por ejemplo, una acción, se elevará, realizará la compra de los CFD sobre esa acción, cerrando la operación en el momento de la venta del contrato. Esto quiere decir que, si el precio de esa acción llega a subir al haber realizado la venta del contrato, el trader obtendría los beneficios correspondientes a esa elevación del valor.
Pero si esto sucede, al contrario, y el trader cree que el precio de esa acción va a bajar, tendrá que vender el contrato cerrando la operación con la compra de los CFD ya vendidos. Por eso, si cuando el trader haga la respectiva compra el precio ha sufrido un incremento, este obtendrá las utilidades correspondientes a la baja del precio.
Algunos de los activos con los cuales es posible operar con los CFD son: materias primas, divisas (pertenecientes al mercado Forex), índices, acciones, criptomonedas, entre otros que podrían ser de tu interés, dependiendo de tus objetivos de inversión y tus metas planteadas.
Beneficios de operar con los CFD
Al ser instrumentos reconocidos en el trading, hay beneficios de los CFDs que es fundamental mencionar. Algunos de ellos son:
Apalancamiento
Esta herramienta puede ser vista como una ventaja o como una desventaja. Con respecto a la primera opción, el apalancamiento es muy útil para aumentar el capital que el trader tiene disponible en un inicio, pues se trata de una especie de deuda con la que es posible financiar una operación. Esto se hace con el fin de adquirir una mayor cantidad de activos en comparación con los que podrías obtener con tu capital inicial.
Accesibilidad
Los CFDs son accesibles para todo aquel que se encuentre interesado en ingresar a los mercados financieros.
Flexibilidad
Los CFDs te permiten tener la libertad de abrir y cerrar las operaciones en el momento que decidas, así como usar las estrategias y herramientas que prefieras.
Riesgos de operar con los CFD
No obstante, también es válido mencionar que los CFD son instrumentos complejos con los que, por lo general, ciertos inversores minoristas pierden dinero debido al desconocimiento de los riesgos que estos traen consigo.
Por eso, a continuación, se describen algunos de los más importantes, con el propósito de que los conozcas y hagas uso tanto de las estrategias como de las herramientas adecuadas para sortearlos de la mejor forma posible.
Apalancamiento
Como se mencionó, este instrumento puede convertirse en una desventaja, ya que, así como es posible obtener una cantidad considerable de rentabilidades, si las cosas no salen bien el apalancamiento puede implicar también grandes pérdidas.
Regulación
A diferencia de otros mercados, los CFD no se encuentra tan regulado como otros, por lo que se recomienda elegir un intermediario seguro con el cual iniciar operaciones.
Ahora bien, algunas de las herramientas con las cuales es posible tratar de evitar cualquier riesgo que se pueda correr al operar con este tipo de contratos son las órdenes Stop Loss y Take Profit:
Stop Loss
Estas consisten en órdenes de compra y venta que se encuentran condicionadas para alcanzar un valor de pérdida específico, evitando que el trader pierda más dinero del que tiene planeado perder.
Take Profit
Por el contrario, estas se tratan de órdenes utilizadas para poner un tope o límite de ganancias en las operaciones. Sin embargo, hay que mencionar que, si se hace uso de esta herramienta, se incurre en el riesgo de que la operación siga generando beneficios después de haberla cerrado.
Conclusión
Recuerda que para Guía del Trader siempre es importante acompañarte en tu proceso formativo sobre los diferentes temas alrededor del trading, por lo que esperamos que este artículo haya sido de tu ayuda para saber más sobre los CFD.
Te recordamos que antes de abrir una posición con cualquier plataforma del mercado te asegures no solo de que el broker cuente con los CFD en su portafolio de servicios, sino también que se encuentre regulado por una entidad de primer nivel y que su sitio web oficial contenga toda la información relacionada con dicha entidad, número de licencia y demás documentos legales que aseguren que se encuentra autorizado.
